El presidente Alberto Fernández destacó “el rol crucial” de los bancos multilaterales de desarrollo y de la banca pública para avanzar en la recuperación ante la crisis mundial que generó el COVID-19 y abogó por construir “una normalidad que acabe con los desequilibrios y las desigualdades que vivimos”. “Nosotros estamos aspirando a que haya otra normalidad, una más inclusiva y que nos contenga a todos”, expresó Fernández en un mensaje que brindó en el marco de la tercera edición del Foro por la Paz de París.
Orientado a mejorar la respuesta global frente a la crisis del COVID-19 y a facilitar un nuevo consenso sobre los principios que deben regir el mundo post-pandemia, esta nueva edición del Foro, que se desarrolla entre hoy y el próximo viernes, alberga la Primera Cumbre Mundial de Bancos Públicos de Desarrollo, “Finanzas en Común. Hacia Sociedades Resilientes y Respetuosas del Medio Ambiente”, liderada por el International Development Finance Club (IDFC).
“Nuestro primer esfuerzo ante la pandemia fue garantizar que el sistema de salud nunca estuviera saturado a la hora que llegaran los contagios. Y ese objetivo lo logramos, pero no fue suficiente, porque con una economía que se paralizaba debimos trabajar mucho para garantizar la sostenibilidad social de la Argentina”, señaló el mandatario al ser convocado para aportar sus recomendaciones sobre la construcción del mundo post-COVID. “Así fue como desarrollamos programas para los sectores más desprotegidos, asistimos al trabajo y a la producción para que el empleo registrado no se perdiera y trabajamos codo a codo con las organizaciones sociales para preservar a los más humildes”, precisó Fernández.
“En ese mismo contexto tuvimos que resolver los problemas que heredamos como gobierno: una deuda con los acreedores privados que era imposible de pagar y cuyo acuerdo logramos que se concrete; y el inicio de la negociación con el FMI que esperamos que llegue a buen puerto”, agregó. Y afirmó: “En este tiempo que se inicia, los bancos multilaterales de desarrollo tendrán un rol más crucial en la reconstrucción, y la banca pública está llamada a jugar un papel central en la reconfiguración de un sistema sociopolítico y productivo más inclusivo y más sostenible”.
En ese sentido, el Presidente señaló que el Banco de Inversión y Comercio Exterior de la Argentina (BICE) financiará un mínimo de 500 millones de dólares hasta 2023 en proyectos que impactarán positivamente en al menos 11 de los 17 objetivos de desarrollo sustentable. “Eso incluye al trabajo decente y el crecimiento económico, la industria, la innovación e infraestructura, la reducción de la desigualdad, más igualdad de género, el agua y su saneamiento y el combate definitivo a la pobreza”, destacó.
“Este es un tiempo en el que nos salvamos juntos, mancomunadamente. La palabra que rige este tiempo se llama solidaridad”, concluyó. La Cumbre Mundial de las Instituciones Financieras para el Desarrollo reúne a 450 bancos e instituciones financieras locales, regionales, nacionales e internacionales, incluyendo los organismos de desarrollo multilateral (BM, FMI, BEI, BAII, BRICS), en tanto que el BICE participa por primera vez por ser nuevo miembro de la red IDFC.